Pasan los días y cada minuto sumerge aún más en la desesperación a los propietarios de un carro de comidas (food truck) de grandes dimensiones que en la madrugada del pasado martes fue enganchado y sustraído en plena vía pública y que según las primeras estimaciones habría tenido por destino la ciudad de Córdoba.
Janet Alí, una de las propietarias del food truck y socia del emprendimiento “Ricos y distintos” que desde hace poco más de dos meses llevaban adelante como una iniciativa familiar, comentó a Rivadavia Río Cuarto 94.7 FM la unidad, valuada en unos 10 millones de pesos, permanecía estacionada en Hipólito Yrigoyen y Thomas A. Edison cuando a las 4.30 del martes, fue enganchada por una Renault Duster para iniciar la huida con el carro.
Explicó que el food truck color negro mide siete metros de largo y dos de ancho y que hacía dos meses que lo tenían, tras adquirirlo en 24 cuotas en dólares, de las que solo habían abonado un par.
A partir de los registros fílmicos de vecinos y aportes de transeúntes pudieron reconstruir que los delincuentes salieron en contramano por Edison hasta General Paz, ahí giraron hacia el sur para tomar Jaime Gil hacia el Centro Cívico.
También se lo vio por calle Estados Unidos, casi ruta 36, y luego hay dos informantes que lo ubican en la autovía cerca de Elena y un camionero en la zona de Despeñaderos.
Si bien radicó las denuncias correspondientes, Alí reclamó a la Justicia y a la Policía mayor celeridad en la investigación sabiendo que cada minuto que transcurre va en desmedro de la posibilidad de recuperar su fuente de trabajo. “Creo que tarde o temprano, va aparecer, pero seguramente sin toda la mercadería y equipamiento que tiene en el interior”, lamenta Alí, para describir que el food truck contaba con equipos de gastronomía para la producción de lomitos y hamburguesas, mesas, sillas, una heladera exhibidora, bebidas y mercadería.
