El diputado nacional por Provincias Unidas, Carlos Gutiérrez, reclamó más precisiones sobre los motivos de la compra de los aviones F-16 y cuestionó la falta de información oficial sobre los motivos estratégicos de la operación, valuada en más de 300 millones de dólares. En diálogo con La Mañana Sin Libreto, sostuvo que el Gobierno Nacional “no ha explicitado cuáles son las razones ni la hipótesis de conflicto” que justifican la incorporación del equipamiento militar.
Otro eje central de su crítica fue el manejo reservado del acto presidencial en el Área Material Río Cuarto. El legislador afirmó que no recibió invitación formal, al igual que —según indicó— el gobernador Martín Llaryora. “No me gusta este nivel de secretismo. Aun si me llegara la invitación, no voy a participar”, dijo.
Gutiérrez señaló que, si bien respalda el fortalecimiento de las Fuerzas Armadas para la custodia del territorio, aún no está claro si aeronaves supersónicas de ese tipo pueden cumplir funciones operativas en problemáticas concretas como el control del narcotráfico en las fronteras o la vigilancia de la plataforma marítima. “Nuestra frontera es un queso gruyere, un colador; tampoco sabemos qué rol tendrían los F-16 allí”, remarcó.
Gutiérrez consideró además que la visita del presidente a Río Cuarto debería ser una oportunidad para abordar temas estratégicos para la región, como la finalización de la autopista hacia Holmberg, el futuro del corredor bioceánico, la situación de la Ruta 158, la circunvalación y el financiamiento para la Universidad Nacional de Río Cuarto. “Es una lástima que no se aproveche la presencia del presidente para discutir estos temas que realmente importan”, expresó.
De todos modos, reconoció el impacto positivo que el evento tendrá para la comunidad, especialmente por el movimiento económico local y la posibilidad de generar nuevos puestos de trabajo. “Si esto permite que treinta familias tengan más actividad, bienvenido sea. Pero necesitamos claridad”, concluyó.
